Descripción
“Si queremos complacer enteramente al corazón de Dios, procuremos, en todo, la conformidad con su divina voluntad, y no sólo la conformidad sino la unidad en todo cuanto Dios disponga.
La conformidad importa que nosotros unamos nuestra voluntad con la divina; mas la conformidad supone algo más… que de la voluntad de Dios y de la nuestra hagamos una sola voluntad, de manera que no queramos si no lo que Dios quiere y que sólo la voluntad de Dios sea la nuestra”.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.